"Muchas
veces los departamentos o las unidades de la empresa "compiten" entre
sí o tienen metas que chocan entre sí. No trabajan como un equipo para resolver
o prever sus problemas, y peor aún, la consecución de metas de un departamento
pueden causarle problemas a otro."
Aunque
Hammer y Champy lo utilizaron como caballo de batalla en su famosa
reingeniería, ésta se concentró en muchos casos en despidos de personal,
fusiones y adquisiciones, perdiéndose así la gran oportunidad para derribar
barreras entre departamentos que se olvidan que la batalla no es interna sino contra
una competencia externa que no da tregua y unos clientes que no están
dispuestos a exigir menos que lo mejor.
Existe un gran desgaste entre
departamentos que hace difícil llegar a soluciones correctas. Hoy en día, el
enfoque basado en procesos y el enfoque de sistemas tímidamente proponen
identificar los procesos y gestionar sus interacciones, pero se debe tener
cuidado al mencionar que el problema es de "organigrama", es decir de
poder, nos guste o no.
No hay comentarios:
Publicar un comentario